infantería ligera. Se empieza a tener noticias de este cuerpo a partir de principios del siglo XIII. Estas tropas estaban integradas por oficiales Catalanes y Aragoneses, y campesinos y pastores oriundos de los valles pirenaicos (aunque los había de muy diversa procedencia: Valencianos, Navarros e incluso Sicilianos). Se caracterizaban por ser tropas de choque de infantería que combatían a pie, con armas y bagajes ligeros. De gran valor y fiereza, entraban en combate al grito de «Desperta Ferro! Matem, matem», «Sant Jordi!» o «Aragón!»… 
Todavía con la resaca de nuestra fiesta, costaba volver a la rutina de siempre: Levantarte temprano, limpiar tu moto y quedar con tu familia que ya te esperaba en Plà de Palau. El cafetito habitual y ruta a Granollers para quedar con el resto de familia. Los Despertaferro MG volvieron a organizar su particular llamada al mundo custom pero en vez de un grito de guerra, fue un canto a las ansiadas butifarras, un reclamo muy importante para todo buen motero cuando se sale un domingo por la mañana. Y evidentemente no podian faltar los Wanderers! 
El pequeño pueblo de Sant Pere de Vilamajor quedó invadido con el rugido de todo tipo de motos custom y de los más importantes moto grupos de Catalunya, moto grupos que , como en tiempos militar, lucían sus mejores vestimentas con sus poderosas cabalgaduras. No faltó de nada en este tercer Despertaferro: stands, música en directo, muchísimos participantes y público. Fue tal la concentración de motards que prácticamente se llenó el recinto provocando unas larguísimas colas a la hora de la suscripción y una cola sin final a la hora de 
cogerse la deseada butifarra. El recinto se quedó pequeño porque todas las mesas estaban ocupadas y el hecho de la larga espera a la hora de inscribirse o almorzar, hizo agotar las existencias de los bares cercanos al recinto que sin duda, hicieron el “verano”. Menos mal que la jornada fue amenizada por la banda Mescaleros, muy conocidos en el ambiente motard. Su poderoso rock y blues poseyó a todos los asistentes y la hora larga que duró el concierto se hizo muy corta. Y los Wanderers, buenos moteros pero hambrientos, se desplazaron en masa a un bar cercano donde los bocadillos de lomo y queso volaron en segundos...y es que cuando hay hambre! Como siempre reinó el buen ambiente y se comentaron las últimas movidas o aquellas cosas que pasaron por alto en la fiesta de colores. Atila nos 
alegró el día ofreciéndonos un video histórico, un vídeo que le ha costado su esfurzo y que todos agradeceremos eternamente por ser de un día , a mi modo de parecer, INSUPERABLE. Mi hermano Atila es grande y todos lo sabemos y es que los wanderers somos ya una familia, que recuerda el pasado, de donde venimos, pero que solo mira hacia el futuro y seguro que éste es nuestro. Allá donde vayamos ya somos conocidos y hasta el propietario de un stand o una familia del Masnou se interesó por nuestro grupo y la futura ilusión de una fiesta Wanderers en espacio abierto...Una vez finalizado el concierto se hizo la típica ruta por la zona, una ruta que, como es habitual, levantó la expectación por todas las localidades por donde pasaban unas espectaculares motos engalanadas para la ocasión. 
Acompañó el buen tiempo durante todo el día y eso animó a que se viviera esta concentración hasta el último suspiro con la entrega de premios...Una buena concentración, una de las obligada en la agenda de todo buen motero, pero viendo como año a año va creciendo reclama ya mas espacio o tiempo para no provocar las aburridas colas...Los Wanderers siguieron la fiesta en Sant Cugat y otros ya en casa tras pasar unas horitas muy agradables ya que fue una salida cortita pero muy aprovechada y es que no hay mejor manera de aprovechar un domingo!!!Texto: Kingcreole
Fotos: Jorderic
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